Ayer salimos un ratito de casa, nada más merendar. Cada mellizo se comió un yogur y luego los subimos al coche para hacer un trayecto de menos de 20 minutos: ¡y los dos vomitaron casi a la vez en la Cybex Sirona! No sabemos si es que uno vomitó por efecto del otro (¿debido al olor?) o que coincidieron los dos.
Creemos que el yogur estaba bueno, así que probablemente se marearan durante el viaje. De ahora en adelante vigilaremos la conducción y procurar que no estén recién comidos antes de subir al coche.